De que se trata el programa "Familias Solidarias"
Sebastian Sanguinetti
Consiste en ofrecer alojamiento, cuidado personalizado y acompañamiento durante un tiempo limitado a niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad

El Ministerio de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires, a través del Organismo Provincial de Niñez y Adolescencia, lanzó una campaña de sensibilización para visibilizar y promover la figura de las Familias Solidarias, una alternativa de cuidado temporal para niñas, niños y adolescentes que, por diferentes motivos, deben ser separados de su familia de origen.
Durante 2023, más de 160 niños, niñas y adolescentes pasaron por esta experiencia. En 2024, el número creció a 219 y este año ya son 245 quienes han sido acogidos en el marco del programa.
Historias que inspiran
Cecilia vive en La Plata con su esposo y su hijo. Tiene poco más de 40 años y trabaja en la ciudad. Un día decidieron sumarse al programa de Familias Solidarias. "Invitaría a todos a no perderse esta experiencia, porque significa dar amor y ofrecer una alternativa al cuidado en instituciones", cuenta. Su primera experiencia fue el cuidado de un niño de 2 años, a quien acompañaron durante algunos meses. "Mucha gente me dice 'yo no podría, me voy a encariñar'. Y sí, claro que uno se encariña, ¡y está bien! De eso se trata: de darlo todo sabiendo que es temporal, de vivir el presente para ellos, de cuidarlos, quererlos y amarlos, sabiendo que en algún momento se irán", reflexiona.
¿Qué significa ser Familia Solidaria?
Consiste en ofrecer alojamiento, cuidado personalizado y acompañamiento durante un tiempo limitado a niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad. Durante ese período, los equipos técnicos de los Servicios Locales y Zonales realizan el seguimiento del caso y trabajan para garantizar la restitución de derechos.
El programa no tiene fines adoptivos. Quienes deseen postularse deben tener más de 21 años, no estar inscriptos en el Registro de Adopción ni tener intención adoptiva. Además, no deben poseer antecedentes penales, denuncias por violencia familiar ni figurar como deudores alimentarios.
Las familias participantes reciben capacitaciones previas y acompañamiento técnico durante todo el proceso. Un equipo de profesionales especializados brinda orientación permanente y apoyo ante cualquier duda, inquietud o desafío que surja en el marco del compromiso asumido.
Las personas interesadas pueden acercarse al Servicio Local o Zonal de Promoción y Protección de Derechos más cercano a su domicilio.
